Descripción
El citrato de clomifeno generalmente se receta a las mujeres para ayudar en la ovulación. En los hombres, la aplicación de Clomid provoca una elevación de la hormona estimulante del folículo y la hormona luteinizante. Como resultado, también aumenta la producción natural de testosterona.
Este efecto es obviamente beneficioso para el atleta, especialmente al final de un ciclo de esteroides cuando los niveles de testosterona endógena están por debajo de lo normal. Cuando un atleta suspende el uso de esteroides, lo más probable es que sus niveles de testosterona se supriman. Si los niveles de testosterona endógena no se normalizan, puede ocurrir una pérdida drástica de tamaño y fuerza. Clomid juega un papel crucial en la prevención de este choque en el rendimiento deportivo.
Los culturistas descubren que una ingesta diaria de 50-100 mg de citrato de clomifeno durante un período de dos semanas hará que la producción endógena de testosterona vuelva a un nivel aceptable. Clomid aumentará gradualmente los niveles de testosterona durante su período de ingesta. Dado que a menudo es deseable un aumento inmediato de la testosterona, el atleta comúnmente usará HCG (gonadotropina corónica humana) durante un par de semanas y continuará el tratamiento con Clomid.
Clomid también es eficaz como antiestrógeno. La mayoría de los atletas sufrirán de un nivel elevado de estrógeno al final de un ciclo. Un nivel alto de estrógeno combinado con un nivel bajo de testosterona pone a un atleta en grave riesgo de desarrollar ginecomastia. Con la ingesta de Clomid, el atleta obtiene el doble efecto de bloquear algunos de los efectos del estrógeno, al mismo tiempo que aumenta la producción endógena de testosterona.
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